Llega el día en que te das cuenta que todo esta cambiando,
pero te pones a pensar y decides que no quieres que nada vuelva, no quieres
sonrisas para que luego vengan lágrimas, ni te quieros para que luego se ría de
ti. De pronto te das cuenta que has hecho demasiado por alguien que no ha hecho
nada por ti, que el siguiente paso es separarse. Olvidar de todo que para eso
es pasado. No pienses que estas renunciando, yo se que lo has intentado con
todas tus fuerzas. Pero debes entender que llega un punto en que sobrepasas la
línea de la determinación a la desesperación. Lo que es tuyo, tarde o tremprano
lo será, y lo que no lo es no importa como te esfuerces, nunca lo será. Recuerda que vales demasiado y no mucha gente esta dispuesta a pagar. Ya se que puede que no nos conozcamos pero nunca juzgues al
destino. Y tal vez no sea nadie para decirte esto pero no te rindas, confía en
ti pase lo que pase y demuéstrale a esa gente que ni un huracán podrá con tu
felicidad. Nunca dejes de tropezar con cada piedra para aprender a saltarlas más
tarde. Cree en los “para siempre”, que ya se que es mucho tiempo, pero hay
gente que lo cumple. No te voy a decir que existen los finales de cuento porque
no los hay, por algo le llama vida. Pero nunca te duermas sin sueño, ni
te levantes sin un propósito, y como he dicho antes nunca vivas por nadie que
no esta dispuesto a vivir por ti. Ningún día se parece a otro y nadie se parece
a ti, que eres única en el mundo, vive al límite. Sólo hay una persona capaz de hacerte feliz
toda la vida y esa eres tú misma. Si alguien quiere entrar en tu vida que entre
y si alguien se quiere ir que salga, pero que no se queden en la puerta mirando
porque molestan a los que quieren estar contigo. “Se feliz a tu manera cielo,
porque la felicidad no es lo que dicen los demás sino, lo que a tí te hace
feliz”.